Lo frágil de vivir de este modo, es la destrucción que dejas a tus pasos.
Un hola aquí y un adiós por allá.
La falsa sensibilidad humanista, se compensa con un sistema,
y es allí donde todo acaba.
Pensaras que estoy loco,
que no tengo remedio, nunca lo tuve,
ni lo quiero tener.
Pero es que tantas cosas detienen la esencia.
Hoy pienso en ti,
mañana pensare en ti.
Hasta que se rompa el hechizo;
y comience un bucle nuevo.
El misterio de ser tú,
el misterio que libero mi humanidad.
La mirada que se perdía.
Quizás no vuelvas a ver la mirada triste
del chico que observaba el infinito.
Quizás no vuelva a ver tu mirada, que llena,
me lleva y me enternece.
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miércoles, 21 de abril de 2010
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