el demonio del insomnio nos perseguía,
creiamos tener vidas casi perfectas,
cada uno por su camino.
La distancia física no fue suficiente,
en nuestras mentes evocábamos una y otra vez
el nombre del otro.
Tantas veces invocamos nuestros cuerpos,
tantas veces nuestra imaginación volaba,
tantas veces nos reencontramos en nuestra
abstracta imaginación.
Parece imposible, que hoy estemos cara a cara,
después de tantos ensayos, cuanta veces no
nos imaginamos esto, nunca creímos que sucedería.
Nos vemos tan diferentes desde aquella tarde,
esa tarde que en la que nuestros caminos
decidieron separarse.
Es el sentido de la vida, el karma, el fantasma del pasado
todos ellos en un complot para que este día
nos viéramos.
Después de estar frente a frente,
congelados, el mundo se movía;
pero nosotros estábamos fríos.
Miles de veces pensamos, soñamos, imaginamos
que esto nos pasaría, pero ni eso nos pudo
adiestrar para la realidad.
Con un hola entrecruzado, una pequeña risa
seguida de una invitación hacia a algún sitio.
Después de recordar viejos conocidos,
que desaparecieron.
Despues de unos cuantos recuerdos,
tuvimos que llegar un punto clave en nuestro
encuentro. Tratamos de escapar, de darle
largas al asunto, pero sabíamos que debía llegar
el momento de hablar de lo nuestro.
Poco a poco fuimos desvelando
nuestras vidas;
preguntas como: ¿Qué hiciste? ¿Qué estudiaste?
hasta tan ridícula, como ¿viste esa película?.
Lo único que queríamos era evitar
hablar de nosotros, de lo que fue un día,
y termino esa tarde oscura del 11 de junio;
hace tanto ya de eso. que solo nosotros sabemos que paso.
Llegamos al tedioso momento de recordar nuestra
relación.
Tantos recuerdos, tantos momentos alegres,
cuantas rabiatas con nuestros padres, y cuantas lagrimas.
Aun nos preguntamos que nos paso,
tu comestiste ese error.
Yo no lo quise creer.
Tantos que se cayaron, tantos que nos sonreian,
para luego solo decir, "yo lo sabia".
La sociedad nos absorbio,
la familia no fatidio,
llegamos al extremo del mundo,
nos creimos mas de lo que eramos.
Miranos ahora, llorando uno frente del otro,
miranos, enojados con todos
miranos, quieriendo soñar de nuevo,
cuando sabemo que desde hace 16 años
todo ha sido una pesadilla.
Un lapso infinito de silencio entre lo 2,
un lapso para pensar en nuevas jugadas.
La ilusion forastera, nos coloca en esta situcion,
acaso podremos recrear, podremos reconstruir
esas fantasias que teniamos de chicuelos.
Pero en que estamos pensanso,
no somos mas que unos egoistas.
Que hay de los demas, que de esas personas
que nos devolvieron parte de nuestros sueños.
Dime que hay de ellos, que hay de esos pequeños,
si de esos pequeños que han crecido en una familia,
que pasara con ellos.
La rueda de la fortuna, nos has jugado encontra.
Como yo lo veo, -me dices- solo tenemos 2 alternativas,
convertirnos en unos aventureros, que pelearan contra las legiones
de adversidades, desaparecemos ante todos, nadie sabra nunca mas de nosotros.
O, simplemente rechazamos esta oferta de la vida, y volvemos con "nuestras felices familias".
-Me miras a los ojos y me dices- tu y yo sabemos que solo hemos vivido parte de la felicidad que merecemos, sabemos muy bien que noche a noche, el demonio del otro nos atormenta.
Dime, que haremos...
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